Jim Beam White
La elaboración del bourbon comienza con la molienda de los granos de maíz (debe constar de por lo menos 51%), centeno y cebada malteada, covirtiéndolos en una harina muy fina que luego se cocerá con agua pura proveniente de los manantiales de piedra caliza de Kentucky. Jim Beam se diferencia no sólo por la selección cuidadosa de sus ingredientes, sino además, por su cocción más duradera a temperaturas moderadas. Esto produce un sabor natural de grano siempre suave. Después de la cocción, el destilador bombea la mezcla hacia un fermentador donde se funde con levadura nueva y levadura desarrollada hace más de 60 años de la reserva privada de Jim Beam. Se conserva así la pureza y la consistencia en cada botella. Barriles nuevos de roble blanco, quemados en su interior, guardan el líquido destilado para ser almacenado en bodegas colocadas en alto. Los expertos creen que el tiempo que el bourbon está dentro del barril es lo que produce su verdadero carácter. Es por este motivo que Jim Beam es añejado por un mínimo de cuatro años para perfeccionar su rico color ámbar y suave sabor.