Perrier-Jouët.
Un perfecto ejemplo del estilo Perrier-Jouët: carácter floral y afrutado, toda una primavera encerrada en una botella. Un champagne que se elabora desde 1854, demostrando hasta la fecha una consistencia extraordinaria. Posee un equilibrio de notas afrutadas y florales, resultando un champagne fresco, vivo y sutil con mucha elegancia.
CATA
Vista:
Tiene un atractivo aspecto dorado, con efervescencia elegante y prolongada.
Nariz:
Posee una viveza y frescura sorprendentes: flores de árboles frutales, flor de lima, limón… Delicado y elegante, al mismo tiempo que intenso y complejo.
Boca:
Destacan sus notas florales, fruta fresca (melocotón, cítricos), pasteles intensos (vainilla, mantequilla), fruta amarilla (albaricoque, mango). Ataque franco, rotundo, equilibrado y estructurado. Vino de mucho cuerpo.